El mundo está cambiando. Y si bien se puede señalar la inteligencia artificial, el aprendizaje automático, la alfabetización privada o blockchain cuando se hace referencia al cambio en el mundo de la tecnología y la mercadotecnia, el cambio más impactante vendrá de un cambio masivo en el comportamiento del consumidor. Las marcas no deben esperar para presenciar este cambio inminente, necesitan imaginarlo y adoptarlo.

• La confluencia de varias tendencias conducirá a un cambio de paradigma significativo en cómo la Generación Z se comportará como consumidores:
  Los innegables efectos del cambio climático están ahora sobre nosotros. Tanto la Generación Z cómo las generaciones futuras sufrirán los efectos del cambio climático que no merecen a menos que se tomen las medidas necesarias ahora, y hay un impulso significativo en esa dirección.
• La urgencia del cambio climático y las realizaciones que lo rodean han impulsado una demanda y una necesidad en rápido aumento de la sustentabilidad de los bienes y servicios en todos los sectores.
• El auge de los inversores de impacto (definidos como inversiones realizadas en empresas, organizaciones y fondos con la intención de generar un impacto social o medioambiental medible y beneficioso junto con un rendimiento financiero) permitirá que se formen modelos de negocio más éticos y sustentables que compitan en el mercado.
• La persistencia lenta pero continuada de la economía colaborativa, la adopción de una mentalidad de "alquiler, no propio" y la proliferación de servicios intensivos en hardware bajo demanda (piense en scooters Lime o Bird) conducirán a una disminución de los gastos de capital personal.
• La explosión de negocios de "captura de capacidad" como Lyft y Airbnb apuntan a un futuro en el que todos y cada uno de los recursos se utilizarán a su máxima capacidad, no solo para la rentabilidad, sino también para reducir la producción innecesaria de nuevos bienes.

Todo esto apunta a un futuro donde los productos sustentables no son una opción, sino un requisito para una nueva generación de consumidores. Según Cone Communications, la Generación Z representará el 40% de los consumidores globales en 2020 y el 94% de ellos cree que las empresas deben abordar problemas sociales y ambientales urgentes. A medida que la Generación Z asciende en las filas de la fuerza laboral y aumentan su poder adquisitivo, juzgarán y evaluarán los productos y servicios con un conjunto de criterios amplio y decisivo al momento de decidirse por una marca o realizar una compra, y las marcas deben estar preparadas para competir.