A medida que nos adentramos en 2024 y el mundo se enfrenta a un número cada vez mayor de desastres climáticos y a su costo cada vez mayor, se está produciendo un cambio de paradigma entre las organizaciones globales.

En 2023, vimos un cambio significativo en la comprensión del caso comercial de la sustentabilidad entre los principales líderes a nivel mundial. La proporción de ejecutivos que pensaban que estaba claro se triplicó en comparación con 2022, según el informe del Capgemini Research Institute.

Las inversiones en iniciativas de sustentabilidad se mantuvieron estables entre 2022 y 2023 y representaron menos del 1% de los ingresos totales en 2023, mientras que los presupuestos de mercadotecnia equivalieron al 9.1% de los ingresos anuales en promedio.

Las empresas deben sentar las bases para una transformación sustentable
En el último año, hemos visto un gran aumento del optimismo entre los ejecutivos sobre el futuro de sus organizaciones. Cuando las perspectivas comerciales son positivas, las inversiones generalmente siguen. Pero aunque más de la mitad dice que destinará más fondos a la sustentabilidad en 2024, deben concentrarse en áreas en las que puedan tener el mayor impacto.

En primer lugar, no se puede gestionar lo que no se puede medir, por lo que las capacidades de presentación de informes de sustentabilidad de las empresas necesitan atención. Si bien la mayoría de las organizaciones tienen bajo control sus emisiones de Alcance 1 y 2, comprender y reducir las emisiones de Alcance 3 sigue siendo un desafío: la proporción de empresas que miden con confianza las emisiones de Alcance 3 disminuyó en 2023. Es comprensible, ya que estas emisiones no están bajo el control directo de la empresa, pero también tienden a ser mucho mayores que las emisiones propias de la organización. Es fundamental garantizar que la empresa cuente con recursos internos y/o externos para rastrearlas y garantizar que se reduzcan adecuadamente.

Las organizaciones pueden obtener grandes beneficios al destinar fondos a la implementación de principios de economía circular y diseño de productos sustentables. También pueden implementar productos y servicios más sustentables.

Las expectativas son altas para la tecnología climática
Las tecnologías climáticas (energías renovables, baterías, hidrógeno bajo en carbono, captura de carbono y combustibles alternativos, entre otras) son un complemento esencial para los cambios de comportamiento.

Tres cuartas partes de los líderes empresariales las ven como una palanca clave para descarbonizar sus cadenas de valor y crear nuevas industrias y modelos comerciales. Observamos una dinámica significativa en este ámbito, ya sea en términos de innovación o inversión, apoyada por el impulso político, en particular en Estados Unidos, China y la Unión Europea. Sin embargo, por ahora, un obstáculo clave es el costo añadido de estas tecnologías. Las innovaciones, como el hidrógeno y la captura de carbono, siguen siendo costosas, lo que, a su vez, aumenta el precio de los productos. Y, aunque las organizaciones dicen que estarían dispuestas a pagar una "prima verde" de alrededor del 9%, se estima que el costo del cemento bajo en carbono producido mediante captura de carbono es entre un 75% y un 140% más alto que el del cemento convencional.