Para superar la brecha digital, los centros comunitarios digitales (espacios físicos que brindan acceso a Internet, dispositivos tecnológicos y habilidades digitales) se han convertido en una solución popular para las organizaciones que trabajan para brindar conectividad a áreas remotas.

• También conocidos como cibercafés y telecentros, estos laboratorios de computación públicos:
  Brindan acceso a Internet a comunidades que antes no estaban conectadas,
• Brindan capacitación en alfabetización digital para dotar a los ciudadanos de las habilidades y el conocimiento necesarios para usar la tecnología,
• Garantizan que las personas y las comunidades puedan usarla de manera significativa y segura para el crecimiento personal y económico.

Si bien estos centros pueden beneficiar a sus comunidades y actuar como puertas de entrada al mundo digital, persiste una pregunta apremiante: ¿pueden los centros públicos de acceso a Internet volverse verdaderamente sustentables y autosuficientes?

A continuación se presentan tres lecciones aprendidas por los centros comunitarios digitales establecidos en el marco de la Iniciativa Airband de USAID/Microsoft, una asociación público-privada que busca brindar acceso a Internet a más mujeres en todo el mundo.

Los socios de la Iniciativa, incluidos los proveedores de servicios de Internet (ISP) y las empresas de tecnología, han construido y administrado estos centros en áreas rurales y semiurbanas y han aplicado diferentes modelos de sustentabilidad una vez que finalizó el apoyo financiero inicial de USAID y Microsoft.

Obstáculos para la sustentabilidad de los laboratorios de computación
Los centros comunitarios digitales suelen depender en gran medida de la financiación de donantes, lo que genera preocupación sobre su viabilidad a largo plazo. La Iniciativa Airband de USAID/Microsoft proporcionó financiación inicial para permitir que las comunidades establecieran los centros, después de lo cual los centros son responsables de financiar sus operaciones continuas.

Sin embargo, los altos costos operativos y de mantenimiento pueden plantear desafíos significativos para las operaciones de los telecentros. En la mayoría de los casos, los miembros de las comunidades no pueden justificar el pago de los servicios de los centros si no encuentran un valor genuino en ellos.

Por lo tanto, equilibrar el acceso asequible con el valor percibido es esencial para cultivar una base de usuarios autosuficientes, y esto requiere una comprensión profunda de las necesidades y aspiraciones de la comunidad.

Estrategias para la sustentabilidad de los cibercafés
Con estos desafíos en mente, cada socio de la Iniciativa Airband ha probado diferentes estrategias para mantener los centros operativos.

Microempresas: centros comunitarios convertidos en cibercafés
Un enfoque prometedor es la transición de los centros comunitarios a microempresas autosuficientes. Por ejemplo, convertirlos en cibercafés que cobren por el acceso a Internet y por el uso de otros servicios, como impresión, escaneo, capacitación para el desarrollo profesional y emisión de documentos gubernamentales.